La actitud durante la entrevista
Ya sea que vayas en jeans y zapatillas o con traje formal, ya sea que uses tacones de aguja o botines, lo verdaderamente importante es que te presentes de manera respetuosa ante tu entrevistador. Sea modesto y no extravagante. Trate de utilizar un lenguaje sencillo y no demasiado elaborado. La presentación de un candidato no refleja en ningún caso sus competencias profesionales, pero podría indicar al reclutador ciertos aspecto de su personalidad. Sólo cuentas con una hora para convencerlo, así que resalta todos tus talentos. Las mujeres deben llevar traje sastre, falda o pantalón. Los hombres deben utilizar un traje formal clásico.
El comportamiento
Nunca llegues a una entrevista demasiado confiado. Debes estar seguro de tus competencias, pero procura exponerlas considerando lo que el puesto de trabajo requiere. Sé preciso, conciso, relajado, pero no demasiado, nunca adoptes una actitud hostil, incluso si te sientes atacado por el reclutador, ya que a algunos de ellos les gusta probar la impulsividad de los candidatos. No caigas en esta trampa, debes saber cómo evitarla.
Ten presente en todo momento que eres tú quien debe convencer y agradar a tu interlocutor. La búsqueda de aceptación también debe ser lo suficientemente discreta como para no ser excesiva. Ten confianza al momento de hablar de tus razones para optar por el trabajo.
La entrevista
El rol del reclutador es conocerte, pero también juzgarte, conocer tus intenciones y comprender cuáles son tus aspiraciones profesionales. Para que pueda hacerlo, debes colaborar.
Conocerse bien
A partir de un mejor conocimiento de sí mismo, se pueden tener argumentos más relevantes. Durante tu experiencia profesional, has aprendido, te has educado y te has hecho útil para resolver problemas. Hazlo saber al entrevistador, pero sé siempre sincero. Nunca mientas, pues el reclutador tiene maneras de detectar cualquier falla en tu discurso.
Memoriza tu CV
Durante una entrevista, los silencios prolongados pueden dar lugar a dudas de parte del reclutador. Debes saber responder a todas las preguntas. Anticípalas y adelántate a la reacción de tu interlocutor. Debes conocer al detalle todo tu CV y saber explicar cada puesto de trabajo, misión, experiencia y rasgos de personalidad que hayas reflejado en él.
Ante preguntas de índole personal, procura responder siempre desde la profesionalidad.
Apóyate con ejemplos de situaciones en las que hayas tenido que utilizar otras competencias que no hayas señalado en tu CV e indica lo que podrías aportar a la empresa. Da un paso adelante, demuestra tu ambición, pero con cierta reserva y humildad.